EDUARDO RAMÍREZ |
La primera guerra mundial es uno de los conflictos menos abordados en cualquier medio. Generalmente, la atención siempre se va sobre la segunda y al nazismo. De ahi lo interesante que es el más reciente proyecto de Ubisoft Montepellier: Valiant Hearts: The Great War.
En Valiant Hearts: The Great War vives en forma de una especie de película animada la historia de cuatro personas dentro de la primera guerra mundial. La historia gira en torno a Emile, un granjero, que es llamado a combate justo después de que su yerno Karl es separado, por su origen alemán, de su familia. También está Freddie, un afroamericano que se ha unido al ejercito francés en busca de venganza; Ana, una enfermera belga que busca a su padre y Walt, el perro.
Al ser un juego de aventura, la historia es un gran elemento de este título y vaya que es bastante buena. Es contada de una manera excepcional, pues a pesar de ser bastante entrañable también tiene sus momentos cómicos y divertidos. Por ejemplo, en un momento estarás huyendo a ritmo de Cancán y, en otro, atendiendo a heridos de guerra. Esto último sin ninguna clase de imagen grotesca o fuerte (lo que me parece excepcional), pues Valiant Hearts logra transmitir muchas emociones y datos de la guerra sin la necesidad de caer en el morbo. Además, está inspirado en cartas que fueron enviadas por soldados durante el conflicto y está complementado por material de archivo, lo que hace a este juego (sin querer, tal vez) un buen material didáctico.
En cuestión de gameplay, Valiant Hearts es más cercano a una película interactiva, donde los escenarios encierran algunos acertijos que hay que resolver jalando algunas palancas y apretando botones. Lo importante de cada uno de estos acertijos es leer lo que ocurre en el escenario y lo que necesitan hacer para avanzar, si no logras captar lo que el escenario te intenta decir, una paloma mensajera te dará pistas para resolverlo. No son nada complicados, pero son bastante ingeniosos y se acomodan perfectamente con la narrativa, por lo que sentirás la presión de huir de un bombardeo o de rescatar a algún personaje en apuros. Entre estos acertijos están incluidas escenas donde deberás usar al perro o tus habilidades para pasar alguna patrulla enemiga o una serie de obstáculos. Además de los acertijos existen un par de minijuegos extras como las batallas con los jefes (el clásico modo de tres golpes, tres fases) o el mover un auto por una serie de obstáculos.
Gráficamente es hermoso, pues el trabajo artístico que contiene el juego es increíble. Esto, sin duda, es gracias al trabajo que se puede hacer con el UbiArt Framework, “culpable” de juegos con el mismo calibre artístico como lo son los dos últimos de Rayman o el desapercibido Child Of Light de hace algunos meses.
Siendo honesto, creo que no me había divertido tanto con un juego de aventura en mucho tiempo. Un género que, en lo personal, considero muy poco entretenido. Valiant Hearts me ganó por lo entrañable de sus personajes, por cómo narrativa y visualmente nos describe los elementos que se dan en la guerra sin ningún tipo de desensibilización o exaltación de la violencia. De hecho, este juego me parece una buena forma de enseñar sobre lo que ocurrió en la primera guerra mundial. Es una compra muy recomendada si buscan un juego sencillo, entrañable e ingenioso.
