SHADE DGO |
Este pasado fin de semana se me dio la oportunidad de asistir a la Anime Expo en Los Ángeles,California; mejor conocida entre los frikis yankees como AX. La travesía fue algo inesperada y divertida. Ésta es una pequeña crónica de lo vivido este fin de semana en el centro de convenciones de los ángeles (LACC) y hasta cierto punto lo que inevitablemente uno piensa en comparativa de lo que es mejor y lo que es peor en nuestro querido México.
Precios de Entrada (Registro) y Filas
Bueno, esto sí que fue de mi sorpresa. El registro fue por un precio de $35 dólares el día por una admisión general; si querías asistir por los 4 días, te daban una promoción de $70 dólares los 4 días del evento. La entrada al lobby, a la Sala de los Expositores, al salón del cosplay y a algunas conferencias, paneles, asientos, conciertos y al concurso de cosplay tenían un costo extra y se tenían que comprar antes del evento. También era preferente comprar tu admisión semanas previas al evento, ya que no se te garantizaba el poder acceder si querías comprar tu boleto el mero día. Había una pulsera que te daba acceso al lobby y a los pasillos de forma gratuita, pero eran limitadas.
Las filas fueron larguísimas para poder recoger el gafete (boleto), pero avanzaron bastante rápido. Además, tenían toldos para sombra y el staff regalaba agua para evitar deshidratación e insolación, un detalle bastante agradable ¡sobre todo que la media de espera fue de hasta dos horas!
En definitiva, para alguien que está acostumbrado a las convenciones mexicanas, es un precio bastante elevado de aproximadamente $450 pesos el día y, obviamente, teniendo la oferta de pagar $900 pesos por los 4 días, el público los paga. Sin duda, aquí está bien puesto el dicho de “si quieres algo de calidad, tienes que pagar por ella” hablando de concursos, paneles, instalaciones y más.
Instalaciones, Expositores, salones
El LACC es enorme, dividido en varias secciones, cada uno con un fin distinto. Primero, está el lobby enorme, donde se encuentran todos los módulos de informes, también este lugar sirvió para tomar fotografías de muchísimos cosplayers que acababan de entrar al recinto, impresionando a asistentes, fotógrafos y otros compañeros cosplayers.
Subiendo unas escaleras eléctricas, se encontraba el pabellón de exhibiciones, donde había muchísima mercancía (literalmente, era el paraíso del otaku comprador), toda traída directamente desde su fabricante y a precios justos; es decir, sin tener que pasar por ningún tipo de vendedor o envío (se llegaban a encontrar figuras hasta mil pesos más baratas, en comparación de las que se venden en México). Los stands que destacaron fueron de Tamashi Nations/Bandai , Bandai Namco (quienes mostraron demos de los juegos que están por sacar al mercado), Good Smile Company, Tecmo Koi, Dark Horse Comics y, claro, el negocio que vendía la mercancía descontinuada a precios bastante razonables. Otros como Crunchy Roll, Hulu y Sentai Filmworks mostraron los próximos estrenos de anime y dieron uno que otro souvenir para mostrar más interés. Este pabellón lo cerraban a las 6 de la tarde y a partir de las 4 p.m., dejaban entrar a todo el público.
Muchos de los Salones son de paneles, donde se dieron diversas conferencias. Por ejemplo, cómo construir tu Gunpla (modelos de Gundam), hubo una plática con el cast de Seiyuus de Kill La Kill, cuya fila estuvo infinita y, por ello, no pude entrar a ella. También hubo (con un costo extra) un Maid Café, un lounge (que es un tipo bar), un salón de karaoke, una zona de baile, un salón para leer mangas y un salón de eventos principales (que también tenían un costo extra). En pocas palabras, hubo actividades de todo y para todos, y si no entrabas a por lo menos una, en verdad no disfrutabas del evento. A pesar de que no fue de mi total agrado pagar aún más para ver una actividad, los escenarios, el sonido y las pantallas, te hacían sentir que el gasto valía la pena.
Había un salón de sets de cosplay, arcadias japonesas y un espacio para poder jugar TCG de manera libre. Estos sets de cosplay iban desde un salón de clases, una cuarto todo “girly” y una alberca de pelotas, hasta un set árabe, unas ruinas industriales y un cementerio, lo cual le dio un plus al cosplayer que se quería divertir en un set mientras le tomaban fotos. Igualmente, había comunidades de fotógrafos (el más conocido era ‘Cosplay Photographers’) que te tomaban fotografías en un set profesional y con retoque, patrocinado por el evento, y si querías que te las imprimieran ahí mismo, tenía su costo extra (obviamente).
El salón de arcadias estaba lleno desde Project Diva, hasta PIU, DDR y el Taiko Drum Master; todos para el disfrute de los asistentes. A su vez, había retas de LoL y juegos retro narrados, como Pokémon Stadium o Starfox 64.
Cosplay y el Masquerade
La cantidad de cosplayers que había en la convención rebasó la primera decena de miles; era una cantidad exagerada de cosplay increíble y de todos los niveles, colores y sabores xD. Algo que me llamó la atención acerca de los cosplayers y creo que en lo personal es un espíritu de fan, es que en verdad hacen el cosplay porque les gusta el personaje. El público se les refería como su personaje, actuaban como el personaje, sentían totalmente el personaje, se dejaban tomar la foto gustosamente, independientemente de su raza, color de piel y complexión. Le aplaudían, le sonreían y las personas que les gustaba la misma serie o traían el mismo traje, hablaban muy amigablemente con ellos. Un espíritu que siento que se ha ido perdiendo en nuestro país.
El concurso conocido como “Masquerade” es uno de los eventos principales, con un costo de entrada desde los $5 hasta los $15 dólares. Estuvo bastante concurrido, con un escenario enorme con excelente iluminación, con dos pantallas gigantes de alta definición, haciendo un video muy profesional y ameno con diferentes tomas de la acción en el escenario, con una diversión y unos diferentes niveles de traje, entre cosplayers de diferentes países (hubo 4 mexicanos que participaron y uno se llevó la mención de mejor performance individual). El jueceo fue muy profesional, que además de evaluar su cosplay, evaluaron su libro de avances, su esfuerzo y el cómo manejaban la presión si algo salía mal. Cabe destacar que el que ganó el concurso fue un Gundam, que no pudo subir al escenario, pero le dieron chance de presentarse abajo del escenario y con los aplausos de apoyo del público, culminó su performance sin complicaciones. La buena vibra de todos se sintió en ese lugar, con una premiación que dejó a todos muy contentos.
En conclusión, fue una expo que me hizo notar los beneficios y carencias que tiene el movimiento friki en nuestro querido México y también cómo es la gente, el público, pues los frikis de nuestro país vecino son mucho mas cálidos y, me atrevo a decirlo, son más fanáticos. Tienen un gusto muy universal y se dejan de esos pensamientos de superioridad que muchas veces se suscita en nuestro país de “tú eres un otaku porque te gusta Naruto y soy intelectualmente superior a ti, porque me gustan los cómics/series under/Kpop/películas de culto,etcétera”. Les hago la invitación a que vean cualquier video de convenciones estadounidenses, lean los blogs y, si existe la oportunidad, asistan a una y verán lo que digo, ya que en todo el mundo estos eventos son para conocer, invitar y alegrarnos de las cosas que nos gustan y siempre pasar un muy buen rato.
