Como recordarán, hace algunos años comenzó cierta euforia por las cosas retro, pero sobre todo por aquello que da nostalgia por el solo hecho de traernos recuerdos de cuando éramos pequeños, todo esto dirigido a público que creció con esos materiales. Esto a muchos ha agradado y los ha llenado de alegría, pero a otros los ha hecho enfurecer porque para ellos los éxitos de antaño no deben tocarse porque son “sagrados”.
Recordemos que, en cuanto al anime, tenemos remasterizaciones de diferentes animes que marcaron una época, entre ellos Sailor Moon, Captain Tsubasa, Sakura Card Captor, etc. Pero hoy hablaremos de la más reciente, que se enfocó en un anime no tan popular como los anteriores y con esto no digo que sea malo, recuerden que el que sea popular no lo hace bueno; me refiero a Fruits Basket.
Fruits Basket fue animada hace algunos años basada en el manga de Natsuki Takaya. La primera adaptación no fue muy bien recibida ya que muchos detalles de la historia del manga fueron omitidos o cambiados. Para empezar, este fue el primer pretexto para hacer una nueva adaptación, pero buscando ser más fiel al trabajo original.
Esta historia nos habla de Tohru, una chica que por mala fortuna se queda sola, ya que su madre muere y su abuelo la recibe en su pequeña casa, pero debe soportar malos tratos de los demás familiares que ahí viven, hasta que un día debe irse a otro lugar porque esa casa estará en remodelación y su abuelo le pide que vaya a casa de alguna amiga, pero ella miente y comienza a quedarse en una tienda de campaña en medio del bosque, hasta que un día es descubierta por Yuki Sohma, quien es un compañero de clases con un secreto muy inusual, el cual está por descubrir.
Yuki decide llevarla a su casa donde vive con otros familiares pertenecientes al clan Sohma. Con esto, ella se verá envuelta entre los animales del zodiaco chino, ya que su oscuro secreto es que si alguno de ellos es tocado por alguien del sexo opuesto se transformarán en encantadoras criaturas.
Este anime es cautivador ya que, al igual que su antecesora, está llena de sentimentalismo por cada uno de los personajes, ya que todos tienen historias conmovedoras, sobre todo la pobre de Tohru ya que, como el nombre del anime lo dice, ella ve al mundo donde cada persona corresponde a algún sabor y entra a la canasta, sin embargo ella se siente aislada porque le cuesta acoplarse con los demás, y no porque sea tímida sino porque no siente que forme parte de ciertos grupos, a lo que ella repite que “una bola de arroz jamás podrá pertenecer a una canasta de frutas”. Pero a pesar de eso ella comienza a entender que las diferencias son las que la hacen única y aunque las frutas sean frutas, no todas son iguales.
Es una historia llena de frases que pueden alentar a cualquiera que se sienta sin algún propósito porque realmente da lecciones de vida, y conforme vayan conociendo a los personajes, cada uno tiene una personalidad diferente y realmente se identificarán.
Además, los nuevos diseños de personaje son muy hermosos. No le quitamos mérito a los anteriores que son más tradicionales, pero estos sin duda resaltan los bellos rasgos de todos.
No pierdan la oportunidad de verla porque es hermosa, y cerramos con una frase de los capítulos recientes porque este anime está en emisión aún así que, si se sienten tristes solo recuerden:
— ¿Después de la nieve qué pasa?
— Llega la primavera