En desarrollo desde 2006, anunciado desde 2013, han pasado 13 juegos y 17 años desde que el primer juego viera la luz, pero por fin llega de manos de Tetsuya Nomura y compañía, Kingdom Hearts III, el siguiente título de este gran crossover entre Disney y Square Enix, que trae de nueva cuenta a Sora como el protagonista y deberemos de librar la lucha contra el malvado Xehanort para poder mantener el poder de luz.
Este largo viaje que nos ha presentado a infinidad de personajes e historias con las cuales nos hemos encariñado, hemos sufrido y salidos victoriosos, pero aquel que fuese el protagonista del primer título tiene un lugar en nuestro corazón y regresa listo para el cierre de este arco. Pero Sora no vuelve solo, en esta entrega Square Enix y Disney traen a Donald, Goofy, Riku y Mickey, quienes se dividirán en dos grupos para avanzar en esta aventura, siendo así Sora, Goofy y Donald quienes se encargarán de buscar a los guardianes de la luz y Mickey junto con Riku a buscar a los portadores de las llaves espada.
Este juego, aunque es una secuela directa del Kingdom Hearts II, la historia comienza justo donde la dejaron Kingdom Hearts: Dream Drop Distancey Kingdom Hearts 0.2: Birth By Sleep, tras el rescate de Sora tras las manos de Xenahort quien casi lo posee durante el examen para convertirse en maestro de la Kayblade, siendo rescatado por Riku, Mickey y Lea.
El resultado es la pérdida de los poderes de Sora, y nuestra querida tercia, Sora, Goofy y Donald, tendrán que buscar una manera de recuperar su fuerza y desbloquear el “Poder del Despertar”, para esto que mejor que visitar aquel que se convirtió en un Dios y Héroe verdadero… Hércules.
En esta tercera entrega tenemos un juego de rol y acción en tiempo real donde recorremos diferentes mundos, mientras nos enfrentamos a todo tipo de enemigos, divertidos desafíos y espectaculares combates, buscaremos tesoros, enfrentaremos varios minijuegos y subiremos nivel para llegar preparados a la batalla final contra la verdadera Organización XIII y como ya dijimos ante Xehanort.
En la historia cada detalle importa.
Vamos a hacer un hincapié en el diseño de los mundos por dos razones, una el salto argumental de cada mundo con respecto a los juegos anteriores es enorme, ¿a qué nos referimos? Cada mundo siempre ha tenido un desarrollo independiente en sus historias que solo viendo o enfrentando a los darkness encontrabas como encajaba en la historia, ahora en cada mundo que visitamos afectara directamente a la historia principal.
Lo que hace que, a diferencia de los otros juegos, tus decisiones dentro de cada uno de los mundos tengan más peso, dando una continuidad fluida a la misma.
Ya no podremos verlos como rellenos, y logran a que la misma historia principal se desarrolle, cada uno posee su propio argumento y son autoconclusivos para que podamos entenderlos por si solos.
Viajando entre mundos del imperio.
¿Cuál es el otro motivo? Hasta ahora las entregas anteriores si bien nos daban algo visualmente bonito, nunca lograban capturar la esencia al 100, algunos escenarios eran muy simples y la actividad en el mundo muy sencilla y en algunos casos apresurada, no negamos que fueran divertidos, pero no había más , pero en esta nueva entrega, todo eso ha sido solucionado, llevar totalmente la magia Disney a cada parte del mundo, como manejamos a nuestros personajes en cada escenario, la magia de cada película, escenarios llenos de vida, easter egg y referencias, una completa experiencia.
Volveremos a ver El bosque de los cien acres, el Olimpo y Twilight Town, vagaremos en el Reino de la Oscuridad pero tendremos nuevos escenarios también como la Caja de los Juguetes, haciéndole honor al mundo que Pixar nos dio a conocer con Toy Story, San Fransokyo donde veremos a Baymax y seremos unos auténticos héroes, el Reino de la Corona donde bailaremos junto a la bipolar de Rapunzel y el carismático de Eugene, Monstruópolis que ya suponen de quien hablamos, Arandelle donde “libres seremos” y más, cada mundo siendo único en su estilo, sus propias mecánicas, siendo diferentes tan variados y entretenidos, ofreciendo nuevos tipos de minijuegos, batallas con restricciones y diseños peculiares.
Te imaginaste piloteando un mecha, luchando entre naves, caminando en medio de una ventisca, pues son de las cosas que podrás hacer.
Eso es uno de los detalles que más nos gustó de este título: en ningún momento de la aventura se siente monótono y nos invita a participar solo por el reto en cada desafío, la variedad de las situaciones y los combates, siempre hay algo nuevo.
El mapa de los mundos posee un tamaño mucho mayor, las pantallas de carga han sido considerablemente reducidas, los mundos como ya mencionamos están perfectamente desarrollados, donde podemos aprovechar las habilidades de Sora al 100%.
Podemos notar que la decisión en cuanto al cambio de motor gráfico del Luminous Engine de Square al Unreal Engine 4 de Epic Games fue un acierto. No solo los modelos y diseños de los personajes. Cabe destacar el desempeño gráfico, el juego contiene una gran cantidad de elementos en cada escena y si bien puedes reproducirlo a 60fps, son raras las ocasiones en los que tenemos ralentización del gameplay o perdida de algún frame. Aun así, el juego posee un modo de configuración “estable” el cual trabaja en un limite de 30fps y evita estos problemas.
Todo esto logra que en Kingdom Hearts III esa sensación de estar jugando a una genial película de Disney, que somos parte de la animación, potencia mucho la inmersión en la experiencia de cada uno de los mundos.
La llave de la destrucción.
En cuanto al sistema de combate seguimos en lo mismo de siempre, ¡golpearemos a todos con nuestra Keyblade! Ok no, pero tenemos un sistema de combate donde compilamos las mejores mecánicas de la serie junto con inclusión de nuevas, se nos permitirá hacer varios combos, lanzar hechizos, bloquear diferentes ataques, seguiremos utilizando objetos, esquivando y ahora invocar aliados de otros mundos.
Veremos el menú de combate clásico de Kingdom Hearts 1 y Kingdom Heart 2 junto con nuevos elementos D-Links, Flowmotion y Shotlock.
Lo más novedoso va alrededor de la Keyblade y su nuevo sistema Formchange, ya que después de varios golpes acertados podemos transformarla en una nueva arma con lo cual adquiere nuevas habilidades, estas transformaciones dependerán de la llave que hayamos equipado, dando como resultado que cada una de ellas tenga su propia utilidad y nos ofrezcan diversos estilos de combate. Podemos mejorarlas en la orfebrería.
Tendremos el sistema de mana (ese donde tienes que esperar a que tus reservas mágicas se recarguen) que vimos en Kingdom Hearts II. Vuelve la barra de tino, ahora podemos poner en práctica nuestra puntería y mostrar nuestras técnicas como tiro certero y el modo acróbata, con el cual podemos apoyarnos de elementos del escenario para obtener impulso y desatar más combos y otros tipos ataques.
No solo eso, tendrás la opción para realizar ataques en equipo, Sora podrá unirse a sus compañeros de batalla para crear poderosos ataques capaces de devastar a los enemigos, tendremos un poco de pirotecnia junto con Donald o lanzaremos un Goofy al aire para que el golpe sea mas potente.
Y también se une el nuevo ataque de “atracciones”, el cual esta inspirado en los distintos juegos mecánicos de los parques de diversiones de Disney, así como suena, puedes invocar a las atracciones cada una contara con su propia mecánica y manera de controlarlas, un gran apoyo en ese punto critico del combate, la animación es bastante larga, pero se puede omitir. De hecho. La configuración del juego posee una opción para omitir las cinemáticas de innovación, de transformación de la keyblade y otros ataques especiales para poder disfrutar de un juego sin interrupción alguna.
Otra de las novedades que tendremos en el juego es el “Gummiphone” el cual recibes cerca del inicio y te permite ver los registros de tus hazañas, glosario de enemigos, cámara para tomar fotografías y selfies, entre otras cosas, y un resumen de la historia al momento, junto con una variedad de minijuegos llamados “Classic Kingdom”
Sobra decirte que busques los cofres de tesoro alrededor de los mundos y los porta fortunas (las marcas con silueta de Mickey) que hay que fotografiar y que bien es un pequeño reto ubicarlas.
Algo que nos decepciono un poco es el que ya no tenemos el Coliseo, a lo más tenemos algunas arenas de combate que se desbloquearan al finalizar el juego, así como el jefe opcional…. Aunque nada que ver con Sephiroth, las batallas son muy sencillas, el jefe final no es ni apantallante, ni poderoso, así que si quieres mostrar tu superioridad puedes darte una vuelta.
La nave te espera
Obviamente nuestra nave Gummi está de vuelta, que mejor medio para viajar entre mundos, podemos ver que regresan directo del Kingdom Hearts 2, las secciones Gummi contaran con mapas abiertos con la finalidad de explorar, desvelar los secretos y encontrar diversos tesoros.
Poco a poco iras personalizando tus propias naves para moverte en el “Océano Intermedio “de los diferentes mundos. El disparo en rieles sigue presente en el juego, aunque bien puedes evitar a los heartless la mayoría de las veces.
Es Yoko no esperábamos menos
Hablemos del OST, es simplemente hermoso, trabajo de la gran Yoko Shimura, toma una forma más orquestal que los anteriores, pero tenemos composiciones realizadas para este título y la remasterización de varios clásicos, los cuales son utilizados en el momento perfecto.
Las voces como siempre luciéndose y nosotros disfrutándolas.
Este es un juego que te durará unas 30 horas o menos, si no te alejas mucho de la historia principal, lo que creemos es un muy buen tiempo de entretenimiento.
KH3 le dará un cierre satisfactorio al arco argumental del “Buscador de la Oscuridad”, con varias sorpresas incluidas y aunque la conclusión es un poco rápida a nuestro gusto, pero no deja de ser un cierre digno para este título, aunque tramposamente, resuelve algunas dudas para traernos otras, lo que nos deja en claro que tendremos Kingdom Hearts para rato.
Un dato adicional, a partir del 31 de enero, se libero un final secreto para el juego, no necesitas el 100% del juego, pero si ver todos los portafortunas, les prometemos que vale la pena.
¿Y a ustedes que les pareció?