TAMASHI | HILDALE NEKO |
Llegamos al final de esta cobertura de Creativa Fest; hablemos de los dos últimos días del evento.
Un gallo con muchos huevos – HuevoCartoon
Antes de hablar de su más reciente película, Gabriel Riva Palacio, director de HuevoCartoon, habló un poco sobre lo difícil que es hacer animación en México: “Los egresados de animación no salen bien preparados […] Al mexicano no le gusta decir sus problemas. Entiéndanlo, cometer una tontería no te convierte en alguien incompetente. Cometerla y no admitir que te equivocaste, sí.”
Riva Palacio mencionó que tuvo que entrenar a su personal moralmente para que no se sintieran mal cada vez que cometieran un error y para que lo supieran admitir. “Ésta es la única manera de aprender”, agregó. Otra actitud que nos limita mucho, según Riva Palacio, es que somos muy sentidos. “Cuando hablan mal de tu trabajo, no hablan mal de ti, sino de tu desempeño”, señaló.
Para crear su estudio, entrenaron a 80 personas y contrataron a un experto en iluminación de Dreamworks. “Entre mejor nos vaya a todos, más industria habrá y los inversionistas creerán en los proyectos […] No hay buenos sueldos porque no hay industria.” Sobre encontrar empleo de animador en México, dijo: “no importa las credenciales que tengas, si sacaste diez en la universidad, pero no sabes animar bien, vas pa’ atrás”.
Con respecto a Un gallo con muchos huevos, Riva Palacio comentó que la producción les tomó dos años y que tuvieron que desarrollar y programar una herramienta para poder animar plumas. Igualmente, señaló que se contó con muy poco capital para hacerla: “tuvimos 75 millones de pesos de presupuesto, lo cual es nada si comparamos el presupuesto de las películas de Pixar, que están alrededor de 200 mil millones de dólares”.
Un chico del público comentó que si en la UNAM, y en específico en la ENAP (Escuela Nacional de Artes Plásticas), existiera la carrera de animación y efectos visuales, habría más gente que se dedicara a ese rubro, ya que es de las carreras más caras. Riva Palacio estuvo de acuerdo y comentó que uno de sus planes a futuro es crear un centro de especialización en animación en México.
Para saber más sobre HuevoCartoon y de su película próxima a estrenarse este año, visiten su página: HuevoCartoon.
Vete a la Versh – Darkar Company
Roberto Alatriz es el creador y director de Darkar Company. Vete a la versh cuenta con alrededor de 3 millones de suscriptores en Youtube y con 7 millones de likes en Facebook. Su humor es totalmente irreverente, pero hilarante.
Sobre cómo fue que surgió esta idea, Roberto comentó que un día en su departamento, abrió Adobe Flash y decidió hacer una animación “nomás porque sí”, pero nunca imaginó el éxito que obtendría. “El primer día mi video tuvo 200 views, ya para la semana tenía dos mil. Así que decidí hacer más videos, pues a la gente le gustaba mi trabajo.”
También nos contó un poco del proceso para hacer un episodio de Vete a la versh. Lo primero es plasmar la idea, después hacer un storyboard para determinar las expresiones del personaje y los movimientos de cámara, después es la grabación de audio (voces y efectos sonoros). Posteriormente, viene la etapa “creando vida” cuando se definen los cuadros clave (o keyframes) y se hacen los in between (dibujos intermedios). Finalmente, se hace el clean up (o pasar a limpio los dibujos), se le da color y se manda a composición. Aproximadamente, la producción de un episodio toma mes y medio. Probablemente, en la tercera temporada, veremos un homenaje (al estilo “La leyenda de Melda”) de Dragon Ball.
Una de las inspiraciones de Roberto es el artista Jerry Padilla, quien en 2003 hizo una animación titulada La verdadera leyenda de Zelda. “Cuando vi ese video, dije ‘¡quiero hacer algo así'”, comentó.
Uno de los planes a futuro de Roberto es crear un videojuego para llamar la atención de los inversionistas y, después, tener el presupuesto suficiente para hacer una película. Actualmente, ya se está desarrollando un juego para iOS y Android.
Animación en México
Este panel fue dirigido por Tania de Léon y contó con la participación de los directores de grandes estudios en México, como Anima Studio, Darkar Company, Ocho Venado, Anim-Art, Come Sesos, Muv Lab y Grupo Kaxan. En general, casi todos los ponentes mencionaron que el principal problema de por qué no hay industria de animación en México es por falta de capital y por falta de mano de obra; es decir, de gente con los conocimientos necesarios para poder trabajar como animador.
Sobre la relación entre los estudios y las universidades, comentaron: “Las universidades deben saber las necesidades de los estudios, el perfil que buscan”. Asimismo, se habló de que en otros países, como Estados Unidos, hay mucho “mentoreo”; es decir, es muy frecuente que los expertos enseñen a los más jóvenes y eso en México no es tan común.
El presidente de Grupo Kaxan, Ricardo Gómez Quiñones, señaló que ya no se deben hacer películas para México, sino para todo el mundo. “En México, a diferencia de Japón, no tenemos una voz propia porque estamos muy influenciados por la cultura estadounidense”, señalaron. Todos coincidieron que la manera para que en México se genere una industria es a través de la creación de propiedad intelectual y, sobre todo, preparar bien a los jóvenes que estudian la carrera de animación, para que el país pueda competir con otros países y no sea solamente maquilador.
Look deeper – Andrew Cochrane
En movimiento desde 1968 – Anim-Art Producciones
Fernando Ruiz fue pionero de la animación tradicional 2D en México. Trabajó como aprendiz en los estudios Disney haciendo La espada en la piedra, y en México realizó la primer película latinoamericana animada llamada Los tres reyes magos, donde intervinieron más de 150 dibujantes y les tomó 20 meses producirla.
Ruiz hizo hincapié en que no le gusta la animación tipo Flash o Toonboom como El chavo del 8 porque no hay un ritmo para los personajes, pues tienen movimientos muy toscos y todos se mueven igual. Es por ello que él prefiere la animación tradicional: “Ahora dicen que la animación por computadora está sustituyendo a la animación tradicional o dibujo animado. Eso no es cierto […] John Lasseter comentó en una ocasión, para una entrevista, que él no se imaginaba Bambi en animación por computadora. Y no sólo Bambi, también Peter Pan, Pinocho, Blancanieves […] El dibujo animado tiene algo maravilloso: el trabajo del artista directamente sobre el papel. Aquí no interviene la tecnología ni la digitalización. No estoy en contra de ella, aclaro, pero creo que la animación de dibujos animados es más hermosa y, además, se sigue haciendo en todo el mundo: en Francia, Rusia, Japón. La obra de Hayao Miyazaki es un ejemplo. Por eso creo que este tipo de animación no va a desaparecer nunca.”