Por Eduardo Ramirez
Antes que nada hay que recalcarle a los fans de Metal Gear que este se trata de un juego de acción y a pesar de tener algunos elementos de stealth este es solo una parte del paquete que es el combate en Metal Gear Rising. Este juego es una excelente combinación de los estilos de diseño de Kojima Productions y Platinum Games.
La historia se sitúa a más de 3 años después de Metal Gear Solid 4. The Patriots, la organización que controlaba el mundo tras bambalinas ha dejado de existir lo que ha provocado que la economía de la guerra entre en un declive pero también que tecnología avanzada como la construcción de cyborgs (humanos con cuerpos de maquina) sea algo común.
Raiden ahora trabaja para una compañía militar de seguridad, Maverick, que se encarga principalmente de misiones que involucran detener amenazas terroristas o golpes de estado, o sea ayudar “a traer la paz”. En una misión en Africa, Raiden y su equipo son atacados por una compañía rival llamada Desperado Enforcement quienes buscan lo contrario de Maverick. Raiden es derrotado y masacrado por lo que con un cuerpo mejor equipado decide buscar venganza y detener a Desperado sin saber que se tendrá que enfrentar a sí mismo en el proceso.
La historia de Metal Gear Rising es una película clásica de samuráis en un ambiente cyberpunk, y créanme que es una muy buena. Para aquellos fans de la franquicia de Kojima Productions hay un sinfín de referencias y datos que unen este capítulo con la saga original, datos que son opcionales si eres nuevo. La narración es concisa y directa, algo que Kojima Productions debería practicar más.
El Gameplay tiene el dinamismo y la marca de Platinum Games pero ofrece un abanico amplio de posibilidades para abordar el combate y la exploración. Generalmente la exploración en estos títulos es en línea recta, aunque en Metal Gear Rising el sentido es el mismo, podrás llegar al mismo punto por diversos caminos y formas, gracias al Ninja Run y la posibilidad de usar el sigilo o atacar a todo el mundo.
Ninja Run es la habilidad de Raiden de cruzar obstáculos de manera automática lo cual hace la exploración y el combate más rápidos y eficaces. Ojo, aunque este botón permite a Raiden correr y evitar proyectiles hay que aprender a usarlo, pues es parte imprescindible del sistema de defensa, más adelante explicare esto a detalle.
El sigilo en este título consiste en ejecutar a los enemigos de manera silenciosa para que no puedan llamar refuerzos o evitar enfrentarse a enemigos poderosos de manera directa. Aquí es donde aparece un guiño para los fans de la saga original, una vez descubierto la alarma terminara en 99 segundos, a menos que el enemigo no te encuentre. En realidad es una simple elección de cómo quieres jugar ya que el juego está pensado para que destaces a lo que te encuentres.
El combate depende de dos tipos de ataques uno débil y otro fuerte. Este último depende de que arma única traigas equipada (armas que podrás encontrar a lo largo del juego), ya que el primer ataque siempre será la katana. Además de los combos básicos podrás comprar nuevos con Battle Points, puntos que ganas en cada batalla, entre más rápido y más grande sean los combos te darán más puntos.
Un elemento que es parte principal del juego es el poder cortar todo a tu paso, esto tiene sus límites sin embargo los niveles están diseñados para mostrarte que realmente puedes cortar cualquier obstáculo. Esto se ve reflejado en el combate con el Blade Mode y la técnica especial Zan-Datsu. El Blade Mode, pone la cámara sobre los hombros de Raiden y con el análogo derecho te permite hacer “manualmente” los cortes a objetos o enemigos. A estos últimos una vez noqueados o cuando tu barra de energía está llena (la cual se regenera golpeando/noqueando al enemigo) podrás ejecutarlos con el Zan-Datsu. Este te permite cortarlo en mil pedazos, de una manera impresionante y muy grafica. Si tus cortes son precisos podrás agarrar las celdas de energía del enemigo y recuperar tus stats.
Metal Gear Rising no tiene un botón de bloqueo pues su defensa se basa en la técnica conocida como Parryng, esta consiste en conectar un ataque débil justo antes del ataque enemigo. Esta técnica es algo complicada, en especial con enemigos veloces. Pero para evitar aventar el control a la pared por esto está el Ninja Run, el cual te permitirá moverte rápido además que existen algunas mejoras que hacen esto menos molesto.
Si no fuese suficiente hay armas secundarias como lanzacohetes y diversos tipos de granadas las cuales meten otro giro a la estrategia de combate, pues son lentas pero poderosas. En resumen, en Metal Gear Rising puedes dominar completamente el combate y defensa con la espada o complementarlo con las otras opciones como el Ninja Run o las armas secundarias, esto lo hace un juego de acción muy versátil.
Gráficamente el juego luce estupendo principalmente por su arte y diseño, tanto de escenarios como de enemigos (en especial los mechas y jefes) y personajes principales los cuales tienen todo el look de Metal Gear pero son usados de manera espectacular y exagerada, muy al estilo de Platinum.
La campaña tiene una duración estándar, entre 6 a 10 horas. Si se te hace poco podrás seguir jugando con las VR Missions las cuales consisten en realizar objetivos en circunstancias especiales que te harán explorar todas las posibilidades del combate. Estas son adquiridas dentro del juego, junto con otros coleccionables lo que te hará seguramente darle un par de vueltas más al modo principal.
¿Defectos? Afortunadamente no muchos, Metal Gear Rising sufre del problema del género: La cámara. Esta es funcional pero sus defectos destacan gracias al sistema de lock-on el cual es muy “suave” por lo que se pierde en muchas ocasiones y parece no ponerse de acuerdo con la cámara en “a donde ver” en ocasiones.
Otro es la falta de dirección al jugador, como pudieron leer Metal Gear Rising tiene muchas opciones y dinámicas en su gameplay, muchas de las cuales no se muestran de manera clara o directa, por lo que tendrás que investigarlas tú mismo.
Metal Gear Rising es un título de acción muy bueno que a los fans de la saga original los mantendrá contentos por el montón de referencias y al resto del público, especialmente a los fans del género, con una verdadera libertad de abordar el combate, acompañado de una sensación verdadera de tener una espada en las manos.