MR MIKE MAYA |
Seamos honestos, en la actualidad lo que más vende es la acción, la ciencia ficción o la fantasía, incluso en lo que nosotros consideramos diferente como es la animación o las series, están poco a poco entrando en este bache; pero de vez en cuando tenemos una historia que rompa los esquemas y que nos cautive por su simpleza y sentimiento puro: Isshuukan Friends, una serie rosa no apta para los más rudos.
Basado en el manga del mismo nombre escrito por Matcha Hazuki, se emitió en abril 2014 y finalizó en junio del mismo año, durando solamente 12 episodios a cargo del estudio Brain’s Base de quien he de decir no conocía nada, pero investigando un poco me di cuenta que ha producido series de mediano renombre como Blood Lad o Durarara!!
Sinopsis:
Kaori Fujimiya es una chica fría que acude a la misma escuela secundaria que Yuuki Hase, un estudiante que está perdidamente enamorado de ella. Al intentar ser su amigo –amigos, sí cómo no– ella lo rechaza pero como buen enamorado –o acosador– sigue insistiendo y lo logra aunque sólo pueda hablar con ella en los recesos y en el tejado. A lo largo de una semana se entera que Kaori pierde el recuerdo de sus amigos todos los lunes. ¿Podrá una amistad resistir este reinicio semanal?
Si por algún motivo te suena la premisa es porque muy posiblemente viste la película de Adam Sandler Como si fuera la primera vez (y la nada geek, El año pasado en Marienbad), pero sinceramente no hay punto de comparación más que el hecho de que olvidan lo sucedido.
Como pocas historias que tenemos actualmente, Isshuukan Friends o Amigos por una semana por su traducción al español, nos presenta una historia tierna y pura. Olvídense de chicas enseñando de más o comedia de doble sentido, aquí veremos amistades y amores inocentes.
Cada uno de los episodios busca enseñar algo sobre la amistad, valor que se encuentra presente en cada capítulo; en algunos, la dificultad de hacer amigos, nuevas amistades, amigos de amigos, entre otras, sus historias no son complejas, en su mayoría son auto-conclusivas y lejos de llegar volverse tediosas y por eso, resulta agradable verlos por su sencillez. Estoy seguro que a más de uno les sacará un suspiro por lo rosa que se tornan las situaciones.
Cada uno de los personajes tiene su personalidad muy marcada: Yuuki Hase es el chico que siempre se preocupa por Kaori y tiene sentimientos hacia ella; Kaori Fujimiya es una niña sensible y muy cerrada que tiene problemas para hacer amigos; Shougo Kiryuu, amigo de Yuuki, es un chico frío e inteligente, pero de buen corazón; por último tenemos a Saki Yamagishi, una chica tierna y un tanto olvidadiza, es como la hermana pequeña de todos.
El diseño de personajes está bien logrado y su estilo mucho más simple que otras series actuales le da una sensación de pureza, a esto se suman los colores presentes, en su mayoría fríos y claros emulando en ratos a la acuarela. La ambientación resalta por su claridad, nunca veremos nada en extremo detallado e incluso se logra ver en el borde una especie de difuminado blanco que lo hace parecer un sueño. Su animación corre con la misma suerte, pues es simple sin realizar muchos cambios en pantalla.
La banda sonora que conforma la serie se siente muy ausente en los capítulos, hecho que me resultó extraño ya que, por lo general, en este tipo de series abunda. Los temas de apertura y cierre son conmovedores y ninguno pierde la línea de lo planteado por la serie. El tema de apertura lleva el nombre de “Niji no Kakera” interpretado por Natsumi Kon, mientras que el tema de cierre lleva el nombre de “Kanade” y es interpretado por Sora Amamiya, quien igual es la encargada de dar voz a Kaori Fujimiya.
Como esta serie hay pocas y a pesar de que los más rudos me dirán que es una serie para niñas, debo decir que hasta al más rudo le va a sacar un “Ahhh”. Si eres fanático de las series románticas, tiernas o muy rosas, va más que recomendada; si no es así, igualmente la puedes ver, al fin no pierdes nada.
Calificación final: 9
