‘Pinocho‘ es el primer largometraje animado de Guillermo del Toro ya disponible en Netflix.
(Antes de comenzar esta nota, escucha esto mientras lees esta nota para una mejor experiencia).
Amiguitos esta columna será algo distinta a lo que suelo escribir, pues esta es mi nota número 100 y la última que redacto en el 2022, y creo que no pude haber elegido un mejor proyecto del cuál escribir que la adaptación de ‘Pinocho‘ de Guillermo del Toro. No solo porque se suma a mi lista personal de “Películas que me han hecho llorar” sino que es una de las pocas películas que me pusieron a reflexionar por un largo rato.
En esta nota por ser la número 100, quiero compartirles mi reflexión.
Espero sea de su agrado y pueda hacerlos reflexionar también.
Él es como yo, ¿por qué lo quieren a él y a mí no?
Hay veces en las que desde muy jóvenes se nos dice que debemos actuar y ser de cierta forma, ya sea que saquemos puro 10 en la escuela, que realicemos “x” o “y” deporte, que tengamos cierta actitud porque “así no se comportan los niños/las niñas” o que nos dediquemos a algo que “nos deje de comer” aunque ello signifique sacrificar nuestro verdadero ser.
Actualmente tengo 22 años, para la fecha de escrita esta nota me faltan 3 semestres para titularme de mi carrera y volteo a ver a mis amigos y conocidos y ¿qué es lo que veo?: Algunos ya acabaron la carrera y/o se titularon, hay quienes cumplen “x” años con su pareja, otros ya se están casando, algunos están trabajando en lo que más le gusta y su servidor sigue soltero y sin siquiera saber cómo se siente estar en una relación…
Por muchos años me sentí como un fracasado luego de ver todo lo que está logrando mi generación y mis amigos sin yo todavía “lograba hacer algo importante”; sin embargo, la vida en ocasiones es peculiar y nos sorprende de formas que nunca nos hubiéramos imaginado.
Lo que tiene que pasar, pasa…
Ninguno de los muchos planes que establecí hace muchos años atrás se ha cumplido: no estoy estudiando la carrera que quise, aún no consigo un trabajo, todavía no tengo novia y ni siquiera estoy estudiando en la universidad a la que quería entrar.
Me sentí acabado.
Sin embargo, por algo pasa lo que tiene que pasar y es muy probable que de no haber fallado en el exámen de admisión, yo no estaría escribiendo esta reflexión en este sitio web, no hubiera fortalecido mis amistades más cercanas, no hubiera conocido a las maravillosas personas que conozco el día de hoy, no hubiera conocido este fantástico medio, jamás se me hubiera ocurrido cumplir mi sueño de una forma que no imaginaba y es altamente probable que no hubiera logrado alcanzar la mejor versión de mí mismo.
Ahora lo veo de una forma mucho más optimista y le veo el lado bueno a muchas cosas; no obstante, si me hubieran preguntado hace algunos antes si estaba disfrutando mi vida, es muy probable que les hubiera dicho que no porque no logré nada de lo que me propuse y tristemente, jamás hubiera logrado ver todo lo que he logrado hasta ahora.
Y un día, ya no estamos
Es fácil compararse uno mismo con los demás y en ocasiones es más “cómodo” acomplejarse y lamentarse porque uno “no ha logrado nada” de lo que los demás han hecho pero ahí está el detalle: ellos son ellos y nosotros somos nosotros.
A veces en la simplicidad de las oraciones están las respuestas.
Es un proceso peculiar, algunos se tardan unos días en entenderlo, algunos nos tardamos años y otros aún lo siguen procesando.
Es difícil no poder siempre cumplir las expectativas que los demás tienen sobre nosotros y ciertamente pega duro cuando decepcionamos a alguien por no cumplir una expectativa, pero un pez no puede dejar de tener branquias, un ave no puede dejar de tener pico y tú querido lector o lectora no puedes dejar de ser tú.
Es más fácil imaginar ser alguien más o vivir la vida de la persona a quien admiramos, y es demasiado difícil visualizarnos como la mejor versión de nosotros mismos cuando tocamos fondo, curiosamente ese es el mejor momento al que podemos llegar porque lo único que nos queda es subir y en cualquier momento lograrás sacar tu verdadero brillo, dejarás de compararlo con el de los demás y empezarás a aceptarlo, empezarás a aceptarte.
‘Pinocho’ más allá de ser una adaptación de la obra homónima, es un mensaje para todas aquellas personas como tú o como yo que tenemos o tuvimos un momento en el que nos perdimos a nosotros mismos, un mensaje de que nunca es tarde para regresar al camino y que siempre debemos hacer lo mejor que podamos porque eso es lo mejor que podemos hacer.
Feliz año nuevo amiguitos, que el 2023 les depare lo mejor y si las cosas se ponen difíciles ya saben qué hacer.