Hace 9 años, un 26 de marzo de 2010, llegaba a las salas de cine una película que ni Dreamworks Animation esperaba se convirtiera en una de sus trilogías más sólidas y entrañables de lo que han creado: Cómo Entrenar a tu Dragón
Luego de una secuela épica llena de batallas, una gran trama y la perdida del gran Estoico y el retorno de Valka, la mamá que creíamos muerta, Cómo Entrenar a tu Dragón 2 retomó esa buena fama de Dreamworks al poder superar, y por mucho, sus secuelas a sus primeras entregas.
El cierre del ciclo de la relación de dragones y humanos ha llegado, Cómo entrenar a tu Dragón 3, llega teniendo muy alto la vara y nos da un final digno de la saga, pero con un desarrollo muy por debajo de lo hecho en su predecesora.
Lo Bueno
¡Guarden las antorchas! La cinta no es mala y afortunadamente hay muchos aportadados positivos de los cuales comentar pues no solo supera con creces en el apartado visual a sus dos antecesoras, sino que brinda buenos destellos en su narrativa.
El apartado visual
Los escenarios, las texturas, la animación y los detalles que podemos ver son de muy alta calidad. Tenemos desde los detalles de la piel de los personajes, los escenarios de la aldea, tanto al principio como al final, y claro está…
El Mundo Oculto
Según se nos da a entender, el mundo oculto es la cuna de la raza de los dragones, un lugar hermoso de por donde se vea y un paraíso terrenal para los dragones, pues cuenta con todos los ecosistemas que cada uno necesita. Además nos muestra que por alguna razón hay una zona de gestación para los dragones de luz negra, donde las escamas de cualquier dragón brillan poco a poco hasta llenarse de luz y hoy otra zona llena de luz donde ahora un reina un Rey Dragón Alfa y la Reina Dragón Alfa (si le podemos llamar de alguna forma), son la pareja alfa que se sitúa por encima de todos los otros dragón y ¡sí! ¡claro que sí! no podría ser de otra forma, Chimuelo es el Rey Alfa y la Furia Luminosa la Reina Alfa, literal, es un paraíso.
El Villano
Resumido, si él hubiera sido el villano en la segunda entrega, fácilmente tendríamos la mejor película hecha por Dreamworks en toda su historia. Es un villano tan odioso, calculador, inteligente, que no tiene límites para su forma de actuar que le queda grande al guión de la película, desde sus acciones hasta su filosofía maquiavelica acerca de que el fin justifica los medios, así sea matar, drogar a sus propios dragones o destruir todo lo que este en su camino, Grimmel te hace pensar que Hipo la tendrá muy difícil para lograr proteger a Chimuelo y a todos los demás dragones.
El final
Dios santo ¡como amé el final! No es el típico vieron todos felices para siempre, es más realista, menos ideal, pero a la vez deja espacio a que no toda esperanza esté perdida.
Luego de muchos años de que los dragones dejan Berk, se da el reencuentro entre Hipo y Chimuelo, puede volver a volar sobre su lomo y mostrarle a sus hijos que todas esas historias sobre dragones que les ha contado son reales, y que aquel amado amigo con el que vivió las más grandes aventuras de su vida es un dragón.
Fue simplemente hermoso el sacrificio de amor que hace Hipo por Chimuelo, ese desprendimiento de dejarlo ir porque lo ama y es más importante para él la felicidad de Chimuelo que la propia, incluso arriesgando su propia vida, simplemente sublime. Para rematar el hecho de que se hayan vuelto a encontrar, haciendo de este un final agridulce, quizá y solo quizá, ellos pudieron mantener contacto hasta el fin de sus días sin poder seguir viviendo juntos, pues los dragones seguirán aguardando a volver a ser descubiertos hasta el día que los humanos seamos dignos de volver a verlos.
Lo Malo
Todo ese grandioso e hilarante humor para morirse de risa mientras veíamos a Brutilda, Chimuelo, Bocón, Pata Pez, Hipo y compañía se fue por el retrete, nada de eso quedo, en verdad NADA, en esta entrega todo se limitó a chistes que llegan a dar gracia la primera vez que los ves, pero se desgastan por completo en la segunda ocasión, y el problema no radica en que veas la película varias veces, si no que se usa varias veces el mismo chiste por parte de todos y cada uno de los personajes: Chimuelo haciendo movimientos raros de pájaro, Brutacio prolongándose hasta el infinito con el chiste de llorar en su barba que en realidad son sus trenzas, Patán queriendo ligarse a la mamá de Hipo, etc. y la verdad pocas veces dan risa.
Lo flojo
El guión fue lo más desganado de la película, sin llegar a ser malo asqueante, pero sí que fue simplón para lo que nos había brindado hasta ahora la saga, fue el guión. ¿Cómo cierras adecuadamente una gran saga que ya supero en su a la entrega original? Definitivamente no metiendo dos historias en una de forma que no logran sentirse orgánicas en su desarrollo y acompañarlas de un guión falto de acción.
Tenemos la historia de Chimuelo y Chimuela, y por otro lado la de Grimmel mata furias; pese a que, en mi opinión, perfectamente pueden pasar ambas, necesitaban darle más peso al hecho de que los estén cazando de nuevo, a que la sobre población de la isla es un problema gigante y de pilón tenemos que es un experto cazando y ¡matando furias nocturnas! No hay que ser un genio para saber que si cazan a tu alfa ya tienen a todos los demás a en la bolsa, por lo tanto el guión debió centrarse en este conflicto, mientras que dejaban en segundo plano el romance de Chimuelo.
En cambio tuvimos un guión desangelado, con un deux ex machina que fue: Ganamos porque somos los protagonistas, ya que esta vez se veían más desorganizados y confiados que en la anterior y pese a ello, logran salir las cosas, el colmo es que la solución a la seguridad de los dragones y la sobrepoblación de los mismos es un lugar que mágicamente nadie había descubierto y que justamente es la solución a todos sus problemas.
Lo único que no hace deplorable al guión es que exploran el crecimiento personal de Hipo, la auto-aceptación y confianza que debe tener en si mismo si quiere salvarlos a todos, y claro la gran inclusión de Astrid como una verdadera compañera a la par de Hipo que puede salvarle en cualquier instante y que le ayudará a rescatar a todos.
Conclusión
Cómo entrenar tu Dragón 3 sin duda posee uno de los mejores finales de todas las sagas de Dreamworks hasta ahora: es agridulce, no todo es perfecto, pero no todo sale del asco. Si dejaran los 20 minutos en pantalla de relación de Chimuelo con Furia Luminosa, y los 20 minutos del sacrificio de amor que hace Hipo por Chimuelo acompañado del reencuentro, bien podría ser toda la película, todo lo demás resultó demasiado prescindible. En mi opinión se lleva un 8.0/10.