MRD EDDIE RIVERS|
Hace algunos días mientras limpiaba el desastre que tengo por cuarto encontré arios objetos que ya daba por perdidos hace años; como mis Beyblades, juguetes de Batman, naves de Star Wars, solo por mencionar algunos. Pero de los artículos recuperados, halle mi deck de Magic: The Gathering y una buena cantidad de cartas de Yu-Gi-Oh! Con las que fácilmente se podrían armar entre cuatro y cinco barajas de duelo.
Lo que me llevo a preguntarme ¿Cuánta gente queda de la que en algún momento llego a jugar juegos de cartas? ¿Cuántos siguen haciéndolo con constancia hasta la fecha? Y mi conclusión fue que realmente ya quedan pocas personas que siguen comprando sus cartas y jugando. Confieso que yo era un gran fan del Duelo de monstruos (Yu-Gi-Oh!) y realmente invertía bastante dinero en comprar mis cartas y mejorar mi baraja, no era muy bueno, pero le hechaba ganitas. Recuerdo que mientras estaba yo en la primaria fue cuando jugaba mucho Yu-Gi en la escuela y me metía en problemas por apostar cartas.
También en dicha época, un muy buen amigo mío intento enseñarme a jugar Magic con pésimos resultados, me acuerdo a la perfección que su casa era una mina de cartas de Magic, ya que en numerosas ocasiones te la encontrabas tiradas en el piso, la mesa o en el garaje. Lo curioso es que años más tarde le agarre el gusto al juego y más o menos la armo.
Después apareció en mi vida un deck de Mitos y Leyendas, el cual era una especie de Duelo de monstruos con la diferencia de que eran personajes de diversas mitologías como la griega, azteca, nórdica, etcétera. La verdad es que este juego nunca pude jugarlo como se debía por que no conocía a nadie que lo jugará.
Y quizás un juego de cartas que me latía tanto como el duelo de monstruos era el que se lanzó de “El Señor de los Anillos”, con personajes de la película. Un set de cartas muy completos y que requería mayor estrategia y que podía llegar a ser muy interesante si sabias como usar a ciertos personajes. Por desgracia las cartas fueron descontinuadas y desaparecido con la fiebre de LOTR de aquel ya lejano 2003.
En fin, recuerdo que después de años de dedicarme de lleno a los trading card games, participar en un par de torneos y comprar cartas de a kilo. Decidí venderlas todas en la famosa friki plaza, para según yo ganar una fortuna por ello… vaya iluso, ya que solo pude vender dos cartas por $10. Y poco a poco fui perdiendo el interés y mis cartas de Mitos y Leyendas y Yu-Gi-Oh! se quedaron guardadas en un rincón en casa de mi primo. Poco después de estos eventos, fue que comencé a jugar un poco de Magic y compre mi primer deck, pero no lo he usado mucho realmente.
Apenas hace un par de semanas, fui a la casa de mi primo y me lo encontré limpiando su cuarto; me comentó que quería hacer espacio y estaba sacando varias cosas para fuera, y entre ellas aparecieron los decks mencionados de Magic, El Señor de los Anillos, Mitos y Leyendas y Yu-Gi-Oh! En ese momento ambos nos pusimos a revivir viejas épocas, a ver cartas de todos esos juegos y jugamos un par de partidas de Magic y Yu-Gi como en aquella época.
La verdad confieso que mientras sacábamos cartas, la invocábamos y decíamos lo efectos de las mismas, mi cerebro hizo un flashback de años a épocas más simples en donde el ganarle la carta a otro era lo máximo. Una época que si bien había videojuegos, cambiábamos de vez en cuando el control por las tarjetas de cartón y la fantasía de que seriamos campeones de estos juegos.
Yo sé que aún hay gente sigue manteniendo vivos estos juegos de cartas y seguirán existiendo mientras una persona siga practicándolos. Y es muy cierto que esta década de los 2010´s es una gran época para ser “Friki”o “Geek”, “Comiquero”,”Otaku”,”Cosplayer”,”Gamer”, etcétera. Pero por desgracia nos hemos vuelto demasiado exigentes con las películas de superhéroes, los animes, los videojuegos, las series y comics. Y en mi humilde opinión creo que se nos ha olvidado ser niños otra vez, como siempre se pregona en el “Día de orgullo friki”, debemos de regresar a disfrutar más las cosas que a exigir tanto. Y no digo que no exijamos calidad, si no que no nos tomemos las cosas tan a pecho y tan personales.
Por ello quizás sería prudente que además del multiverso de opciones geeks, que existen para nosotros. Que retomemos los juegos de cartas, para ejercitar nuestro cerebro y apagar de vez en cuando el monitor. Y convivir como se hacía antes cuando los trading card games estaban en su gloria, no digo que no dejemos de hacer lo que nos gusta por jugar cartas, si no que le variemos un poco y hagamos que ese espíritu de juventud que caracteriza a los geeks, siga vivo.
Sé que se oye algo muy utópico y sacado de un libro motivacional. Pero ese es mi sentir. Los invito a que disfrutemos esta época para ser geeks y no escondernos como en el pasado. Los invito a que desempolven su barajas y volvamos a jugar estos juegos, recordando las viejas épocas. ¿Los invito a que nos cuenten que juegos de cartas recuerdan? ¿Cuáles eran o son sus favoritos? A los que siguen jugando desde hace años, ustedes ¿Comparten mi sentir? o ¿Cual es su opinión al respecto?
Nos leemos la próxima
¿Te atreves a cruzar la línea de El Vortex?