La Navidad se acerca cada vez más, y si te gusta el horror y las películas alrededor de esta celebración que se salen de lo normal y establecido, continúa leyendo, porque Elfos, una nueva serie de Netflix, puede que llame tu atención.
Elfos, o Nisser en su título original, es una miniserie de seis episodios que, en teoría, busca compaginar la celebración de la Navidad con una historia de horror, algo parecido a lo que se hizo con la muy recomendable película Krampus: El terror de la Navidad, del año 2015.
Dirigida por Roni Ezra, Elfos se centra en una familia, de la que creo no se menciona nunca el apellido, compuesta por Mads, el padre; Charlotte, la madre; Kasper, el hijo mayor y Josefine, la hija menor y a la postre protagonista de esta historia.
Nuestros personajes, solo por variar un poco, deciden viajar a una remota isla danesa para celebrar la Navidad. Un lugar aislado donde se encuentra un exuberante y profundo bosque, así como una pequeña comunidad rural.
La isla en cuestión se llama Årmandsø, y desde las primeras imágenes que podemos ver, nos percatamos que algo extraño ocurre allí, pues se insinúa que una vaca es atacada por algo muy violento y voraz que mora en lo profundo del bosque.
También desde los primeros minutos se nos muestra uno de los puntos fuertes de Elfos, sus escenarios naturales, que son realmente sorprendentes y muestran un gran trabajo en cuanto a fotografía y dirección artística se refiere.
Ya en la isla, y mientras viajan en automóvil hacia la cabaña en la que se hospedarán, Josefine y su hermano tienen una pequeña pelea, haciendo que los padres se distraigan por un segundo, hasta que su vehículo se sacude, como si hubieran golpeado algo en el camino.
Al descender, ven que la parte frontal del auto tiene rastros de una sustancia viscosa y negra, que la niña descubre que también se encuentra en algunas plantas que conducen a un pastizal cercano, hacia donde se dirige guiada por la curiosidad y la culpabilidad de haber herido algún animal.
La historia de Elfos tiene un comienzo algo lento, pues nada interesante ocurre hasta cerca del final del segundo episodio, y aunque después de eso luego mantiene más o menos el ritmo de los acontecimientos, eso no la exime de tener algunos problemas argumentales, ambos ligados a su corta duración.
Para comenzar, resulta extraño que le dieran a Elfos formato de miniserie, cuando su historia bien pudo ser contada en una película de dos horas, ya que los minutos extra en realidad no aportan nada, al menos no de manera argumental ni en cuanto a personajes.
Y hablando de personajes, este es uno de los puntos más flojos de la serie. No hay muchos de ellos, y si bien todos llegan a hacer algo en pantalla, no tienen nada de desarrollo, salvo por Møller, quien casualmente también es el más interesante de todos ellos.
Es decir, los personajes empiezan y acaban siendo exactamente los mismos, no evolucionan ni se percibe que hayan aprendido nada. Y esto resulta especialmente chocante en el caso de Josefine, la protagonista de Elfos. Sobra decir que a partir de este punto habrá spoilers de la trama.
Derivado de las acciones de la niña, al menos tres habitantes de la isla son asesinados, personas inocentes que nunca se establece que hicieran algo para merecer semejante final. Y a pesar de esto, no hay ninguna consecuencia para Josefine.
Es verdad que llega a sentir algo de culpa durante algunos segundos y que la líder de la isla intenta ofrecerla en sacrificio para intentar resolver las cosas, pero no recibe la menor reprimenda de parte de sus padres, quienes incluso le dicen que en realidad no hizo nada malo y su intención era buena.
¿Cómo es esto posible si gente murió por su culpa y su misma familia se puso en riesgo? No es que esperara que le dieran una paliza, pero al menos que le hicieran saber que sus acciones fueron malas y tuvieron consecuencias todavía peores.
No es de sorprender que me resultara un personaje odioso y no fuera capaz de empatizar o simpatizar con ella.
Y ya que salió el tema de los padres, estos son unos incompetentes de cuidado. Comenzando con el padre, que de la nada decide ignorar las indicaciones de que siguiera el camino de la costa, y en su lugar decide atravesar la isla, ocasionado con ello todo el problema.
La madre no es mucho mejor. En cierto momento su hija desaparece en una isla desconocida y actúa como si no pasara nada, por no decir que parece en todo momento que no tiene autoridad sobre sus hijos.
Dejando de lado la escritura de personajes, Elfos tiene otros problemas: transiciones bastante forzadas y algunos agujeros de guion.
El en caso de los primeros, el cambio de día a noche se siente bastante abrupto y fuera de lugar en al menos un par de ocasiones. Es decir, en una escena todavía hay bastante luz visible, y a la siguiente ya es noche cerrada, sin transición alguna.
Esto se puede entender, hasta cierto punto, debido a la corta duración de la historia, pero también es innegable que esto parece más bien reflejo de una edición de escenas deficiente y poco orgánica. En cuanto a agujeros de guion, o cosas que no tienen mucho sentido, recuerdo principalmente dos.
En cierto momento varios Elfos escapan del lugar en el que estaban contenidos. Møller destruye a uno, pero, ¿y el resto de ellos? ¿Simplemente regresan al bosque tras matar a los isleños? ¿Seguían merodeando por el lugar cazando a más gente? La serie nunca lo aclara.
Otra cosa que no tiene sentido es cuando atropellan al bebé elfo, pues por como se sacude la camioneta de la familia, pareciera que le pasaron por encima cuando menos, y la criatura debería estar aplastado en el camino.
Sin embargo, cuando lo vemos por primera vez, solo tiene un rasguño en una de sus piernas, ni siquiera se insinúa que esté fracturada. Y no, no es que los elfos tengan una gran resistencia física, ya que la historia no establece eso en ningún punto de su desarrollo. Simplemente no tiene sentido.
Ahora bien, a pesar de sus defectos y errores, puedo reconocer que Elfos quiso proponer una historia interesante que recuerda a los trabajos del escritor Arthur Machen, en especial lo relacionado con el “pueblo blanco” y el “Gran Dios Pan”.
Otra cosa que le celebro a la serie, es que buscara hacer esa mezcla de folk horror (horror rural) y lo navideño, si bien en la práctica este segundo elemento pasa a un poco al olvido y, salvo un puñado de escenas relativas, es un tema que desaparece bastante.
Como ya dije antes, sus escenarios son fantásticos, y la fotografía bastante decente. Sobre la música no puedo decir mucho, básicamente porque no la recuerdo, lo que ya lo dice todo al respecto. Otro elemento positivo son los efectos especiales, no hay muchos, pero los que están son aceptables.
Haciendo un balance general de lo bueno y lo malo de Elfos, puedo decir que se trata de una obra a la que bien puedes darle una oportunidad, ya que al final resulta entretenida, en especial si te gustan las historias de monstruos y horror. Eso sí, solo no esperes demasiado de su guion.
LO BUENO
- Escenarios
- Fotografías
- Efectos especiales
- Historia
LO MALO
- Agujeros de guion
- Desarrollo de personajes
- Transiciones forzadas
- Música olvidable
LO FEO
- Josefine