MARIAN CASABLANCAS |
El fin de semana recibimos la segunda noticia más impactante en los últimos dos años por parte de la empresa japonesa de animación Studio Ghibli. La primera de ellas fue el inesperado retiro de una de sus fundadores, el cineasta Hayao Miyazaki, en el año 2013, y la segunda es la que recibimos por parte de Toshio Suzuki, uno de los productores del estudio, quien dio a conocer que Ghibli dejará de hacer películas. (ACTUALIZACIÓN: Esto último no es del todo cierto, debido a las malas interpretaciones de sus declaraciones.)
Esta noticia resulta muy impactante, ya que muchos de los seguidores de Ghibli suponían la próxima época dorada del estudio tras el estreno de Se levanta el viento, la última cinta de Miyazaki, la cual tuvo éxito a nivel mundial, ya que fue nominada al Oscar por mejor película de animación y, aunque no fue la ganadora, eso suponía una mayor difusión en países que no fueran Japón, en donde la gente iría a ver el porqué de su nominación.
Sin embargo, de acuerdo a las declaraciones de Suzuki, Se levanta el viento sólo pudo recolectar 91 millones de dólares, cuando El Viaje de Chihiro obtuvo la cifra de 191 millones de dólares al momento de su estreno. Aunque la cantidad recaudada por Se levanta el viento no es una suma tan baja, el productor dijo que ésta no mostraba ninguna ganancia para el estudio.
Una de las dudas que se quedó al aire tras el anuncio, fue la ya anunciada Omoide no Marnie, la nueva película que el estudio ya estaba dando difusión. Toshio Suzuki dijo que esta cinta será la última que Ghibli producirá. Omoide no Marnie fue estrenada en Japón el 19 de julio de este año y aún no tiene fecha de estreno en otros países.
Al concluir su declaración, Suzuki dijo que Studio Ghibli ahora sólo se dedicará a la gestión del material intelectual que ya poseen, además de la administración de museo de Ghibli que se encuentra en el país nipón. Igualmente, cabe la posibilidad de que el estudio cree material freelance para publicidad.
Sin duda, esta noticia alertó y entristeció a todos los fanáticos de la animación y de Ghibli, ya que pocas casas creadoras de animación han podido bajar del trono a la empresa del ratón creando películas que, además de entretenidas, cuenten con historias bien escritas y con imágenes increíbles de paisajes y personajes. Y es que para mantener la misma calidad y continuidad en los trazos de cada cinta, una de las cartas bajo la manga de Ghibli siempre fue mantener el mismo equipo de dibujantes en cada proyecto bajo un salario competitivo (cosa que no sucede en otros países para ahorrar dinero).
Desde 1985, que fue creada, hasta 2014, Ghibli brindó a muchos de los seguidores de la animación contenidos e historias que marcaron su gusto por la cinematografía e, incluso, la niñez de muchos fanáticos. Aunque esta decisión sea triste, quizá es el momento de dejar que el Totoro gigante en la gran pantalla azul nos diga adiós y así mantener a este gran estudio con lo que es: un grande del medio cinematográfico.
Para sus fans, de los cuales es seguro cada uno tiene a su personaje favorito, sólo quedará disfrutar de lo que nos ha brindado estos años Ghibli. En lo personal, el autobús felino irá conmigo dejando marcado el por qué Studio Ghibli es mi favorito.
R.I.P. Studio Ghibli (1985-2014)
