MR. MIKE MAYA|
Cuando hablamos de productos chinos, lo primero que se nos viene a la mente son lo baratos que resultan, pero también la poca calidad que ofrecen la gran mayoría de ellos; sin embargo, y por extraño que parezca, el tercer productor mundial de teléfonos inteligentes es Xiaomi.
Durante el 2014 alcanzó a vender 61 millones de teléfonos duplicando así las ganancias respecto a 2013, tan solo en el tercer trimestre de 2014 sus ventas subieron un 211% y pasó de tener el 2% al 5% del mercado.
¿Pero cuál es el secreto detrás de este gigante asiático? En primer lugar hay que tomar en cuenta que centra su mercado en China y países cercanos, ahora con el segundo lugar en su país natal solo detrás de Samsung.
Otro factor que juega a su favor son sus equipos pues si bien son de bajo costo, rondando los 130 dólares, no decae la calidad en ellos; inclusive su primer modelo llegó a ser considerado el Iphone Killer en China, contando con un diseño bastante similar.
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Aunado a lo ya mencionado, podemos agregar sus buenas campañas de publicidad que han atraído a grandes cantidades de usuarios, así como el hecho de que la mayor parte de sus ganancias se basa en complementos y aplicaciones.
Su objetivo de expansión se centra en países como México, Indonesia, Rusia, Tailandia y Turquía. Aprovechando los recursos de las ventas por internet. Pero no sólo su crecimiento es territorial, igualmente se encuentran en la producción de nuevos productos diferentes a los teléfonos como es el Mi Box mini o su posible anuncio de la incursión en el mundo de los videojuegos.
Por bien que luzca el camino para esta empresa emergente, aún le queda la prueba de fuego y con ello me refiero al mercado americano. Sólo el tiempo y el buen –o mal– manejo de sus productos determinarán el triunfo del que parece el competidor asiático con mayor crecimiento.
Vía: CNN
